domingo, 28 de julio de 2019

142# Reseña: El nombre del viento

Sinopsis:
Viajé, amé, perdí, confié y me traicionaron. 
He robado princesas a reyes agónicos. Incendié la ciudad de Trebon. He pasado la noche con Felurian y he despertado vivo y cuerdo. Me expulsaron de la Universidad a una edad a la que a la mayoría todavía no los dejan entrar. He recorrido de noche caminos de los que otros no se atreven a hablar ni siquiera de día. He hablado con dioses, he amado a mujeres y he escrito canciones que hacen llorar a los bardos.
Me llamo Kvothe. Quizá hayas oído hablar de mí.

Reseña:
El nombre del viento, por fin, es un honor para mí reseñar una novela de tal calibre. Este libro lo leí hace como 5 o 6 años, ya he perdido la cuenta y, hace poco salió como opción de lectura en la lectura conjunta de la que formo parte. Ahí vi mi oportunidad, más aún después de que un compañero mío me comentara que a finales de año publicarían la tercera parte (no estoy muy convencida de que realmente sea así, pero la esperanza es lo último que se pierde). De tal forma que hace unas semanas lo releí, feliz de poder volver a sumergirme en las palabras de Patrick Rothfuss.

Empezaré hablándoos del comienzo, esas dos primeras páginas, que, para mí, constituyen el mejor principio que he tenido el placer de leer. Y, por qué, os preguntaréis… Pues porque para mi es poesía, su prosa, la forma en la que liga las palabras tiene música propia. Sí, lo sé, estoy poniéndome sensiblera, pero es que realmente me encanta.

Y así, con esas dos páginas, ni más ni menos, te cautiva durante el resto de la lectura. La particularidad que posee entre muchas otras la novela es que empieza por el final, y no por cualquier final, sino por el que presumo será el del tercer libro. Empieza con Kote, un tranquilo posadero y con Bast, su aprendiz, que posee mucho más que rasgos humanos. Pero, sobre todo, empieza con la aparición de Cronista, un hombre que se dedica a contar la verdad sobre las historias y, qué puede ser más historia que la de Kvothe y su leyenda. La verdadera historia empieza cuando este convence a Kvothe de contar su historia, la de verdad y, lo hará en 3 días (sí, cada libro es un día) y, es de esta forma que nos adentramos en sus vivencias.

Entre ellas conoceremos a Kvothe, que en un inicio no es más que un chiquillo, muy inteligente pero un niño aún. Conoceremos a su familia, los Edena Ruh, artistas itinerantes, aquellos que le enseñaron todo sobre actuación y música, formándolo en aquel que será su instrumento, el laúd. Durante sus viajes conocerá a un hombre, un arcanista, aquel que ha completado sus estudios en el arcano (en la universidad) y que le enseña todo lo que está en su mano para que, llegado el momento el pudiera decidir proseguir sus estudios si quisiera.

Todo podría haber sido muy distinto en la vida de Kvothe sino fuera por la aparición de aquellos cuentos de leyenda hechos realidad, los Chandrian y, las desgracias que los acompañan. No os diré más, pero a partir de su aparición y de sus consecuencias, la vida de nuestro protagonista se verá trastocada radicalmente y, vivirá un sinfín de aventuras, entre ellas, su paso por la universidad, que es sin duda alguna mi parte favorita de la novela. Puede sonaros banal, pero os aseguro que nada que salga de la pluma de Patrick puede serlo. Yo no os explico más porque quiero que descubráis como yo lo hice, las maravillas que esconde este libro y, más aún, el placer de leerlo.

En definitiva, el mejor libro de fantasía que he leído nunca, por encima de Juego de Tronos y marcando la cúspide del género para mí. Sé que son unas expectativas elevadas, pero realmente la prosa de Patrick es una maravilla hecha libro y espero que, si no habéis tenido la oportunidad de disfrutarla, la tengáis ahora porque si algo tengo claro es que merece la pena.

5/5
Sobre el autor...
El nombre del viento, el fulgurante debut literario de Patrick Rothfuss y el primer volumen de la trilogía «Crónica del Asesino de Reyes», ha consagrado al autor como fenómeno editorial y lo ha convertido en un hito de la fantasía internacional. Con traducciones a treinta y cinco idiomas y elogios apasionados por partes de los lectores y de los críticos, obtuvo el premio Quill al mejor libro de literatura fantástica en 2007 y lleva vendidos diez millones de ejemplares en todo el mundo.

Le siguieron: El temor de un hombre sabio (Plaza & Janés, 2011), la segunda entrega de la trilogía, que se posicionó en los primeros puestos de las listas de libros más vendidos desde la primera semana en las librerías, y La música del silencio (Plaza & Janés, 2014), una novela independiente ambientada en el mismo universo, ilustrada por Marc Simonetti. También es autor de Las aventuras de la Princesa y el señor Fu (Plaza & Janés, 2012), un cuento no apto para niños ilustrado por Nate Taylor.

Por su maestría como narrador y la originalidad de sus historias, la crítica ha equiparado a Rothfuss con grandes escritores como J.R.R. Tolkien, Ursula K. Le Guin y George R.R. Martin. Lectores de todas las edades y aficionados o no a la literatura fantástica recomiendan con entusiasmo esta novela, destinada a convertirse en un clásico.

Patrick Rothfuss vive en Wisconsin y, aparte de dedicarse a la escritura, dirige Worldbuilders, una organización benéfica con fines humanitarios. Actualmente está trabajando en la revisión del esperadísimo tercer volumen de la serie «Crónica del Asesino de Reyes»

¿Lo habéis leído? ¿Os gustó tanto como a mí? Y si no... ¿A qué esperáis?

miércoles, 24 de julio de 2019

141# Reseña: El hombre de tiza

Sinopsis:
Echando la vista atrás, todo comenzó el día del terrible accidente durante la feria, cuando Eddie, de doce años, conoció al Hombre de Tiza.
Fue el Hombre de Tiza quien le dio la idea de los dibujos: una manera de dejar mensajes secretos entre el grupo de amigos.
Fue divertido hasta que los dibujos condujeron al cuerpo sin vida de una niña.
Sucedió hace treinta años y Ed pensaba que todo había quedado olvidado.
Sin embargo, recibe una carta que contiene solo dos cosas: una tiza y el dibujo de un muñeco.
La historia se repite y Ed se da cuenta de que el juego en realidad nunca terminó...

Todos tenemos secretos.
Todos somos culpables de algo.
Y los niños no son siempre tan inocentes.

Reseña:
Vi este libro hace un mes en una librería en Cambrils (la librería más bonita que he visto nunca, no sé si alguno la conocéis, os pongo foto más abajo, es preciosa). Realmente, el primero que me llamó la atención fue el de "la desaparición de Annie Thorne" pero vi que fue publicado a posterior y como encontré un ejemplar de este en edición de bolsillo en, no me lo pensé más, ¡Me lo quedé!

La verdad es que es un libro corto, se lee rápidamente y genera intriga. Su consecución consta de dos líneas de tiempo, una en el presente y otra en la niñez del protagonista, cuando se sucedieron los hechos que lideran toda la trama. 

La autora nos presenta un grupo de niños de unos 10-12 años alguno más bueno que otro pero traviesos todos, ya se sabe el peligro que tienen los niños a esa edad y, en la de líos que pueden llegar a meterse... Nuestro protagonista, Eddie "Monster" como lo llaman sus amigos, es un chiquillo al que le gusta coger cosas que no son suyas. Y, aunque el punto de inflexión en la historia empieza con un accidente de feria, lo que realmente da comienzo a los enigmas son los mensajes de tiza que empiezan a dejarse unos a otros en frente de sus casas, cada uno de un color distintivo para saber en cada momento de quien era el mensaje.

A partir de aquí y a lo largo del tiempo suceden diversos hechos inexplicables a los que se dará respuesta a lo largo de la lectura.

Vemos como todo esto resurge en el presente del protagonista cuando aparece uno de sus antiguos compañeros de pandilla que quiere hablar con él, trayendo consigo el pasado de todos. 

Aunque la trama por la sinopsis prometía mucho, uno de los principales motivos que han influido en que no disfrutara todo lo que habría podido de la novela ha sido la falta de conexión con Eddie, sobre todo con el del presente, eso ha hecho que me costara acabar de meterme en la trama. Lo he sentido muy ajeno a mí, muy resignado y me ha parecido una vida bastante triste.

Otro factor y, el más importante, es que lo de los mensajes encriptados me llamaba mucho la atención, era básicamente lo que me hizo comprar el libro y, que al final todo se explicara con relativa "sencillez" me ha dejado con el gusanillo y con un sinsabor.

En definitiva, un libro ameno y muy rápido de leer, con varios enigmas intrigantes pero que no ha estado a la altura de mis expectativas.

3/5

Sobre la autora...

C.J. Tudor vive con su familia en Nottingham, Gran Bretaña. Ha desempeñado diversos trabajos a lo largo de su vida: presentadora de televisión, redactora o paseadora de perros. Ahora es feliz dedicándose a escribir libros.

¿Lo habéis leído algún libro de la autora? ¿Qué os han parecido? ¡Contadme!

jueves, 4 de julio de 2019

140# Reseña: Toda la verdad de mis mentiras

Sinopsis:
¿Puede mantenerse una amistad a pesar de las mentiras?

Una despedida de soltera en autocaravana.
Un grupo de amigos...

...y muchos secretos.

Reseña:

Estaba paseando por la casa del libro cuando me topé de frente con él, ¿Cómo no me había enterado de su publicación? Quise llevármelo en cuanto lo vi, sin embargo, me hice la difícil un pelín hasta que, cómo no, acabé cayendo.

Si habéis leído mis reseñas de Fuimos canciones, ya sabéis que me he vuelto completamente fan de esta autora porque realmente es la única que hace que disfrute del género.

Esta novela en cuestión nos adentra de lleno en un grupo de amigos, con sus más y con sus menos, en concreto conocemos a Coco, que comparte piso con Marín, su mejor amigo o… ejem ejem… su amor platónico, o más que platónico. Al que no se puede acercar por dos cuestiones básicas, uno, ¿cómo va a arriesgar su amistad? Y dos, es el ex de una de sus mejores amigas y componente del grupo en el que están ambos. Sí, la cosa pinta mal. Imaginaros como puede complicarse si lo juntamos con un viaje en caravana para celebrar una despedida de soltera, sí, eso mismo y ahí lo dejo.

Cita pág 297

Marín se acerca, encaja su cuerpo con el mío, abraza mi cintura y acerca su boca a mi oído antes de empezar a decir:

- ¿Cómo no me lo vas a dar? Ahí, metida en mi cabeza, colonizando mi vida, haciéndolo todo mejor. Coco, seamos sinceros: has puesto el listón tan alto que es imposible que nunca, jamás, ninguna sea la adecuada. Si te comparo con cualquiera, siempre salen perdiendo. Y, hostia… Sé que no debería hacerlo, que está mal, pero lo hago a menudo. Demasiado. ¿Cómo no voy a estar confuso?


Lo que encontraréis si os animáis con este libro son sentimientos. Emociones. Eso, exactamente eso es lo que nos da Elisabet Benavent. Puede parecer un libro, pero, no os equivoquéis, cuando es ella la que se encuentra tras sus páginas este pasa a ser mucho más, va cobrando forma hasta volverse real.

No, sin duda sus novelas no son una más. Nos habla de personas, de sus historias, de sus vidas que, aunque ficticias, podrían perfectamente no serlo. Beta Coqueta nos da realidad, nos deja salir de nosotros mismos y llegar hacia ellos, esas personas que, siendo sus personajes, comparten un poquito de cada uno de ellos con nosotros. Durante la lectura, yo, Laura, pasaba a ser un espectador secundario y los que cobraban protagonismo eran ellos: Coco, Marín, Blanca, Gus, Aroa y Loren. Son ellos, ellos y sus circunstancias, nada más.

Cita pág 446

Hay canciones,
pequeña,
que son un himno al desamor,
al tuyo y al mío,
que carecen de sentido
si no es para decirnos al oído
cuánto hemos perdido.
Susurros de lo bonito que supimos hacerlo
durante un minuto
o dos.
Qué putada,
pequeña.
Qué putada perderte tanto y para siempre.



Sin duda, lo mejor de sus novelas es que las siento, me sumerjo de tal modo que la lectura pasa a formar parte de mi vida diaria, abarcando desde las comidas, los paseos en transporte público, hasta los minutos antes de irme a dormir. Tanto, que cuando veo que las páginas vuelan, me da pena despedirme de todos ellos.

Cita pág 456

<…> Coco, mi vida, no hay vergüenza en retirarse de una guerra en la que, batalla tras batalla, siempre empatas. Una emoción siempre tiene que ganar a otra; mantenerse en la fina línea que las separa no es vida. A veces la paz es, simplemente, tirar la toalla. Duele, pero se olvida.



Sin embargo, aunque me cueste, tengo que ser objetiva. Por eso tengo que decir que, si bien la novela en su conjunto me ha encantado, el final me ha decepcionado. Supongo que era difícil lograr que estuviera a la altura del resto, sin embargo, casi cualquier final podría haber sido más impredecible que este. Se veía venir a leguas y, la verdad es que me ha resultado bastante plano. En fin, la perfección no existe, ¿no es cierto?

4/5

Sobre la autora...


Elisabet Benavent cursó estudios de Comunicación Audiovisual en la Universidad de Valencia, tras lo que se mudó a Madrid dónde se especializó en Arte y Comunicación. Terminados sus estudios, pasó a trabajar para una gran multinacional, actividad que ha sabido combinar con su gran pasión por la literatura.



¿Lo habéis leído? ¿Qué os ha parecido? ¡Contadme!